Por Abel Cuapa
La diputada federal, Ana Teresa Aranda Orozco, afirmó que Jesús Guillermo N. detenido por la Fiscalía General del Estado (FGE), como presunto asesino de la activista Blanca Esmeralda Gallardo, es “un chivo expiatorio”.
En entrevista, la panista explicó que el pasado sábado por la mañana llegaron ministeriales a la casa del señor, vecino de la hoy occisa, rompieron la puerta, entraron y se lo llevaron.
Consideró que ante la presión nacional e internacional que está sucediendo por el asesinato de Esmeralda, el gobierno estatal, que encabeza Miguel Barbosa Huerta, quiere resultados, “y no importa que los tenga que inventar”.
“Estoy convencida que a don Guillermo lo están usando de chivo expiatorio, no es justo, lo vamos a defender también. Queremos que se encuentren a los verdaderos culpables y se castiguen”, exigió.
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Informó que el señor era el vecino en Villa Frontera, a quien le tocó colocar la bomba de agua en el edificio a las 5 de la mañana y fue ahí donde escuchó los disparos, e inmediatamente fue a auxiliar a Esmeralda.
“Corrió a auxiliarla, vio a su vecina en un charco de sangre, él fue quien la vio morir en sus brazos, era un vecino que había ayudado a Esmeralda a ayudar a su hija, y toda la Unidad Habitacional lo reconoce como una persona trabajadora, honrado, eso se suma a todas las pifias que viene cometiendo la Fiscalía”, sentenció.
Dijo que el asesinato de la integrante del colectivo Voz de los Desaparecidos, es un asesinato brutal donde urge que haya justicia.
“Las mujeres de Puebla no estarán seguras, ni vivirán en paz mientras sigamos teniendo estos niveles de impunidad”, advirtió.