¿Qué es la brecha salarial? y ¿cómo afecta a las mujeres?
La discriminación, roles de género y el acceso a oportunidades educativas y laborales influyen en la brecha salarial

Rumbo al 8M, creemos que es importante abordar el tema de la brecha salarial, pero primero que nada, ¿sabes qué es la brecha salarial? Seguramente habrás escuchado, pero te lo vamos a explicar para que comprendas este fenómeno.
La brecha salarial se refiere a la diferencia en los ingresos promedio entre hombres y mujeres. En términos más sencillos, es la disparidad en lo que ganan hombres y mujeres por realizar trabajos similares o de igual valor.
Puntos clave para entender la brecha salarial:
- No siempre se trata del mismo trabajo:
- Aunque a menudo se asocia con la comparación de salarios entre hombres y mujeres que realizan el mismo trabajo, la brecha salarial también refleja diferencias en los ingresos promedio en general.
- La discriminación de género, los roles de género tradicionales, la segregación ocupacional (donde las mujeres se concentran en trabajos peor remunerados), la falta de acceso a oportunidades de desarrollo profesional y la carga desproporcionada de responsabilidades familiares son algunos de los factores que contribuyen a la brecha salarial.
- ¿Cómo se mide?
- La brecha salarial se mide generalmente como el porcentaje de la diferencia entre los ingresos promedio de hombres y mujeres.
En resumen, la brecha salarial es un indicador clave de la desigualdad de género en el ámbito laboral y refleja una compleja interacción de factores sociales, económicos y culturales.
¿Cuál es la brecha salarial en México?
La diferencia de ingresos entre hombres y mujeres en México alcanza un promedio del 16%, es decir que las mujeres ganan 84 pesos por cada 100 pesos que recibe un hombre aún cuando se desarrollen en un mismo puesto y realicen las mismas tareas. También existen informes que indican que los hombres reciben en promedio un ingreso laboral por hora trabajada 34.2% mayor al de las mujeres.
¿Cuál es la brecha salarial en Puebla?
Informes recientes muestran que los hombres registran un salario diario asociado a trabajadores asegurados en el IMSS mayor que el de las mujeres, existiendo una diferencia del 20.53%.
Esta disparidad tiene sus raíces en varios factores:
- Trabajo no remunerado: Las mujeres dedican en promedio 43 horas semanales a labores domésticas y de cuidado, mientras que los hombres solo aportan 15 horas (según la Encuesta Nacional sobre el Uso del Tiempo, ENUT).
- Mayor informalidad: Muchas mujeres optan por empleos informales debido a la flexibilidad horaria, lo que las expone a condiciones laborales precarias, sin acceso a seguridad social, guarderías o derechos laborales.
- Falta de acceso a puestos de liderazgo: Las mujeres enfrentan obstáculos para alcanzar cargos de mando debido a la ausencia de un sistema de cuidados universal, lo que limita su desarrollo profesional.
La violencia de género también tiene un impacto económico directo. La percepción de inseguridad influye en la decisión de muchas mujeres de continuar sus estudios, abrir un negocio o buscar un empleo remunerado.
Estos datos refuerzan la desigualdad persistente: las mujeres no solo ganan menos en el mercado formal, sino que enfrentan una brecha aún mayor en la informalidad.