Por: Abel Cuapa
Después de dos años que no se llevó a cabo por la pandemia del COVID-19, en este 2022 se desarrollará la tradicional procesión de Viernes Santo en Puebla.
De acuerdo con la Arquidiócesis local, la actividad religiosa está prevista y se realizará con orden y las medidas necesarias; a menos que la situación cambie y el número de contagios se eleve, se tomaría la decisión de suspenderla.
La procesión de Viernes Santo en Puebla, tiene su origen en una antigua tradición que se instauró desde la época virreinal y que se llevó a efecto hasta mediados del S. XIX.
Fue en el año de 1992 cuando se revivió esta importante y fervorosa tradición para recorrer así algunas de las principales calles del Centro Histórico.
Además, la Arquidiócesis de Puebla informó que las celebraciones religiosas de esta temporada se realizarán con todas las medidas sanitarias que ya se han estado implementando, para prevenir más contagios por Covid-19.
El miércoles de Ceniza, 2 de marzo, marca el inicio de la Cuaresma, y el signo es la imposición de la ceniza, que una vez más se realizará dejándola caer sobre la cabeza de la persona, para evitar el contacto físico; además de las medidas ya conocidas, se procurará que no haya aglomeraciones al interior de los templos, sino que se cuente con aforo controlado y la gente pueda entrar y salir de manera ordenada.
En las comunidades donde los viernes de cuaresma haya celebraciones de gran devoción a alguna imagen de Jesús, también se realizarán las festividades con las medidas ya conocidas, evitando las aglomeraciones tanto en el interior de los templos como en las posibles procesiones.
Para la Semana Santa, que este año inicia el domingo 10 de abril, los párrocos y rectores de templos, pondrán especial atención en que las fiestas pascuales se lleven a cabo con decoro, orden y la solemnidad que requieren, pero siempre guardando todas las providencias necesarias para cuidar la salud de todos.
Foto: Agencia Enfoque
Discussion about this post